En 2005, un grupo de profesores/as de Secundaria, sensibilizados por el lamentable estado de las enseñanzas científicas, nos embarcamos en una hermosa aventura: La de crear una Asociación que reivindicase una mayor presencia de las Ciencias en escuelas, institutos y ciudadanía con el fin de mejorar la Cultura Científica.

Para lograrlo, propusimos al MEC y a la Consejería de Educación, mientras desplegaban su vorágine reformista, plasmada en las diferentes leyes educativas (¡hasta tres en 10 años!), una serie de medidas entre las que siempre han estado presentes las siguientes:

• La dotación de espacios físicos y recursos materiales en Primaria y Secundaria
• La realización de desdobles para posibilitar las prácticas en todas las áreas científicas
• El aumento de las horas lectivas en 3º ESO
• La obligatoriedad de las Ciencias en 4º, una formación científica básica en todas las modalidades de Bachillerato y una sólida formación científica general en el Bachillerato de Ciencias y Tecnología.

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